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Un año después del fin declarado oficialmente de la pandemia de COVID-19 en Estados Unidos, los cuidadores están restaurando pacientemente las capacidades de servicio que la epidemia robó a sus comunidades.
El Centro de Salud Conductual Valleywise en Phoenix, Arizona, se encuentra entre los ejemplos más recientes. Después de que la escasez de personal relacionada con la COVID la obligara a recortar los servicios psiquiátricos, la red está trabajando para reponer su capacidad de atención de salud mental reabriendo 15 camas para pacientes hospitalizados.
Valleywise Health, rebautizado como Maricopa Integrated Health System en 2019, es el sistema de atención médica de red de seguridad del área de Phoenix y el proveedor más grande de Arizona de atención de salud conductual para pacientes internados por orden judicial. Sin embargo, la restauración de incluso un número modesto de camas marca la diferencia, según los líderes del sistema de salud.
Otros pasos incluyen la restauración planificada de tres alas ubicadas en el vecindario Maryvale del oeste de Phoenix que se vieron obligadas a cerrar en 2022 debido a la escasez de profesionales de la salud mental.
Para que eso suceda, Valleywise Health ha estado capacitando a nuevos psiquiatras, al mismo tiempo que recluta y contrata agresivamente enfermeras, técnicos y otros miembros del personal psiquiátricos.
Si todo va según lo planeado, las unidades cerradas reabrirán durante los próximos 12 a 18 meses para servir nuevamente a los ciudadanos de Phoenix.
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