Ranidel De Ocampo Jr. jugando para el Ateneo Blue Eagles en el torneo de balonvolea masculino Temporada 87. –FOTO UAAP
Es raro que un componente de baloncesto pase al balonvolea. Aún más raro si ese atleta es hijo de uno de los mejores jugadores de baloncesto que de ningún modo haya jugado en y para el país.
Ranidel De Ocampo Jr., hijo y homónimo de la cartel de la PBA y Gilas Pilipinas, escudriñamiento dejar su huella en el balonvolea a posteriori de probar suerte en el baloncesto.
El artículo continúa a posteriori de este anuncio.
De Ocampo, de 16 abriles, jugó un segundo deporte para el Ateneo en la temporada 87 de la UAAP, cuando se vistió para las Águilas Azules en el torneo de balonvolea masculino a posteriori de una temporada con el equipo de baloncesto en el torneo inaugural de baloncesto de la escuela secundaria.
El estudiante-atleta de segunda procreación ha estado disfrutando de su etapa como central del Ateneo. Pero admitió que todavía tiene mucho en lo que trabajar desde que pasó al balonvolea el verano pasado.
“Estoy eficaz de estar mejorando de alguna forma”, dijo Ranidel Jr. al equipo de medios de la UAAP. “Todavía necesito purgar mi trabajo porque soy nuevo [to the sport]. [I just need to] Trabajar más para mejorar aún más mi pernio”.
El artículo continúa a posteriori de este anuncio.
De Ocampo, de 6 pies 6 pulgadas, admitió que su intrepidez de cambiar de deporte no fue claro, más admisiblemente por razones personales.
El artículo continúa a posteriori de este anuncio.
“Fue difícil dejar el baloncesto porque sentía que no quería defraudar. [my parents and my coaches]”, dijo De Ocampo. “Me disculpé y les dije que period necesario, elegí cambiar [sports].”
El artículo continúa a posteriori de este anuncio.
El apoyo de los mayores
“Mis padres fueron quienes influyeron en mí para probar el baloncesto. Y lo intenté y me esforcé en el baloncesto, pero, al closing, sentí que no podía hacerlo”, añadió el destacado del Ateneo, quien dijo que parte de su intrepidez de dejar el baloncesto fue ver a sus hermanas, Stephanie y Madelaine, suceder el tiempo de sus vidas jugando balonvolea.
“Me di cuenta de que disfruto jugando balonvolea”, dijo.
El artículo continúa a posteriori de este anuncio.
Sin incautación, resultó que no tenía por qué preocuparse. Ranidel padre apoyó la intrepidez de su hijo e incluso compartió algunos recordatorios.
“Me dijo que siguiera trabajando porque en el momento en que lo deje, habrá una enorme [slide in my game]. Así que concéntrate, trabaja, disfruta y recital a mis entrenadores”, dijo De Ocampo.