Las potencias occidentales están buscando establecer contacto con los nuevos gobernantes de Siria, con el objetivo de evitar un caos al estilo de Irak o Libia a posteriori de la caída del régimen de Assad en manos de los rebeldes liderados por islamistas.
La principal diplomática europea, Kaja Kallas, se dirigía a Damasco el lunes, a posteriori de que varios países, incluido Estados Unidos, anunciaran que habían hecho acercamientos iniciales.
La situación en Siria, aliada desde hace mucho tiempo con Irán y Rusia, sigue siendo volátil y las naciones occidentales desconfían de las raíces de Al-Qaeda de Hayat Tahrir al-Sham (HTS), que tomó el poder en una ataque relámpago.
Pero nadie quiere dejar suceder la oportunidad de forjar vínculos, cubo el peligro de fragmentación y resurgimiento del camarilla Estado Islámico, que nunca ha sido completamente erradicado.
“La primera reacción de Oeste fue sin duda sostener que no se reúnen con terroristas”, afirmó Denis Bauchard, del Instituto Francés de Relaciones Internacionales.
HTS, que tiene sus raíces en Al-Qaeda, sostiene que ha renunciado al yihadismo, pero sigue proscrito como camarilla terrorista por varios países occidentales, incluido Estados Unidos.
“Pero hay una verdad política… y claramente una carrera para establecer contacto lo más rápido posible”, añadió Bauchard, ex embajador.
“El principal objetivo”, añadió, es que Siria no caiga en un “caos total”.
Adicionalmente de Bruselas y Washington, París tiene previsto remitir a partir del martes una representación diplomática a Damasco para “retomar posesión” de los fondos inmuebles franceses y establecer “primeros contactos” con las nuevas autoridades.
España nombrará un enviado peculiar, mientras que el Reino Unido ha anunciado que se han establecido contactos diplomáticos con HTS.
– Respetabilidad –
“Los europeos esperaron la reacción estadounidense, que les animó a dar el paso”, afirmó Hasni Abidi, director del Centro de Estudios e Investigaciones sobre el Mundo Árabe y Mediterráneo de Ginebra (CERMAM).
El enfoque fue “pragmático”, mientras que el pueblo sirio dio la bienvenida a los rebeldes, añadió.
“Era necesario estar entre los primeros en mostrar la voluntad de los europeos de ayudar al pueblo sirio” y tener “una posición de selección, ofreciendo no legalidad sino cierta respetabilidad a HTS, que tiene un status de autoridad de facto”.
Los diplomáticos no ocultan las dificultades, con Siria en peligro de fragmentación y de los islamistas de linde dura, dijo el lunes en Bruselas el ministro saliente de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot.
En sus primeros comentarios desde su huida de Damasco, Bashir al-Assad dijo el lunes que Siria estaba ahora “en manos de terroristas”.
Todavía insistió en que no había planeado irse cuando los rebeldes tomaron la renta y que Moscú solicitó su desocupación de la ciudad.
Europa tiene varias palancas a su disposición, incluida la ayuda financiera para la reconstrucción y el eventual motín de las sanciones para empujar a las nuevas autoridades de Siria alrededor de una transición política aceptable para Oeste.
El ministro de Asuntos Exteriores sajón, David Lammy, dijo el domingo que Londres tenía “contacto diplomático” para asegurar que se establezca un “gobierno representativo” y se aseguren las existencias de armas químicas.
Volker Perthes, del Instituto Teutónico para Asuntos Internacionales y de Seguridad (SWP), dijo este fin de semana que a todos les interesa respaldar un “proceso político apoyado por la ONU pero propiedad de Siria” para un gobierno inclusivo.
– Amojonar la influencia turca –
Kallas, de Europa, dijo la semana pasada que no deberían repetirse los “horribles escenarios” de violencia sectaria y el resurgimiento de extremistas en Irak, Libia y Afganistán.
Los líderes occidentales desconfían de cómo los talibanes presentaron un frente más moderado hasta que tomaron Kabul en agosto de 2021.
Pero Abidi afirmó: “Cada Estado tiene su propia dietario, prerrogativas y preocupaciones”.
Los cuatro diplomáticos franceses que se esperan en Damasco el martes intentarán “sondear a los nuevos líderes” sobre la potencial amenaza yihadista a la seguridad franquista francesa, añadió.
Unos 100 franceses se encuentran entre los grupos islamistas radicales que derrocaron a Assad en Siria y han estado viviendo en el bastión indisciplinado de Idlib, en el noroeste, durante abriles.
“Por parte de Estados Unidos, lo que más nos preocupa es cuál será la relación con Israel”, afirmó Bauchard.
Otro gran desafío para Oeste será impedir que la Turquía del presidente Recep Tayyip Erdogan, que ve una oportunidad de expulsar a los kurdos de su frontera con el apoyo de facciones sirias, sea el único interlocutor en Damasco.
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