BEIRUT (AP) — El líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, ha liderado el grupo militante libanés durante las últimas tres décadas y lo transformó en uno de los grupos paramilitares más poderosos de Medio Oriente.
Los ataques aéreos israelíes del viernes por la tarde derribaron seis edificios en el suburbio de Harek Hreik, en el sur de Beirut, el mayor ataque en la capital libanesa en casi un año de combates entre Israel y Hezbolá.
El ejército israelí dijo que el ataque, que mató e hirió a decenas de personas, alcanzó la sede de Hezbolá en Beirut. Tres importantes canales de televisión israelíes dijeron que Nasrallah era el objetivo de los ataques en los suburbios del sur de Beirut, lo que no ha sido confirmado oficialmente por Israel. Los funcionarios de Hezbollah no hicieron comentarios.
He aquí un vistazo al ardiente y carismático líder:
¿Quién es Hassan Nasrallah?
Bajo el liderazgo de Nasrallah, de 64 años, Hezbollah ha librado guerras contra Israel y ha participado en el conflicto en la vecina Siria, ayudando a inclinar el equilibrio de poder a favor del presidente Bashar Assad.
Nasrallah, un estratega carismático y astuto, transformó a Hezbollah en un archienemigo de Israel, consolidando alianzas con líderes religiosos chiítas en Irán y grupos militantes palestinos como Hamás.
Idolatrado por sus seguidores chiítas libaneses y respetado por millones de personas en todo el mundo árabe e islámico, Nasrallah ostenta el título de sayyid, un honorífico destinado a significar el linaje del clérigo chiíta que se remonta al profeta Mahoma, el fundador del Islam.
Un orador apasionado visto como un extremista en Estados Unidos y gran parte de Occidente, también es considerado un pragmático en comparación con los militantes agitadores que dominaron a Hezbollah después de su fundación en 1982, durante la guerra civil del Líbano.
A pesar del poder que ejerce, Nasrallah ha vivido en gran medida escondido en los últimos años por temor a un asesinato israelí.
Cómo llegó al poder
Nasrallah, nacido en 1960 en el seno de una familia chiita pobre en el empobrecido suburbio de Sharshabouk, al norte de Beirut, fue posteriormente desplazado al sur del Líbano. Estudió teología y se unió al movimiento Amal, una organización política y paramilitar chií, antes de convertirse en uno de los fundadores de Hezbolá.
Hezbolá fue formado por miembros de la Guardia Revolucionaria iraní que llegaron al Líbano en el verano de 1982 para luchar contra las fuerzas invasoras israelíes. Fue el primer grupo que Irán respaldó y utilizó como forma de exportar su tipo de Islam político.
Nasrallah construyó una base de poder a medida que Hezbollah con el tiempo se convirtió en parte de un grupo de facciones y gobiernos respaldados por Irán conocido como el Eje de la Resistencia.
Dos días después de que su líder, Sayyed Abbas Musawi, de 39 años, fuera asesinado en un ataque de un helicóptero artillado israelí en el sur del Líbano, Hezbollah eligió a Nasrallah como su secretario general en febrero de 1992.
Cinco años después, Estados Unidos designó a Hezbolá como organización terrorista.
Bajo Nasrallah, a Hezbollah se le atribuyó el mérito de liderar la guerra de desgaste que condujo a la retirada de las tropas israelíes del sur del Líbano en 2000, después de una ocupación de 18 años. El hijo mayor de Nasrallah, Hadi, murió en 1997 mientras luchaba contra las fuerzas israelíes.
Después de la retirada de Israel del sur del Líbano en 2000, Nasrallah alcanzó un estatus icónico tanto dentro del Líbano como en todo el mundo árabe. Sus mensajes fueron transmitidos por la propia estación de radio y televisión por satélite de Hezbollah.
Ese estatus se consolidó aún más cuando, en 2006, Hezbollah luchó contra Israel hasta un punto muerto durante la guerra de 34 días.
Cuando estalló la guerra civil en Siria en 2011, los combatientes de Hezbollah se apresuraron a intervenir y se pusieron del lado de las fuerzas de Assad, a pesar de que la popularidad de Hezbollah cayó en picado a medida que el mundo árabe condenaba al ostracismo a Assad.
Su papel en el conflicto actual
Un día después de que comenzara la guerra entre Israel y Hamas el 7 de octubre, Hezbollah comenzó a atacar puestos militares israelíes a lo largo de la frontera, calificándolo de “frente de respaldo” para Gaza.
En discursos a lo largo del conflicto, ha argumentado que los ataques transfronterizos de Hezbollah habían alejado a las fuerzas israelíes que de otro modo se concentrarían en Hamas en Gaza e insistió en que Hezbollah no detendría sus ataques contra Israel hasta que se alcanzara un alto el fuego en Gaza.
Durante las últimas semanas, continuó adoptando un tono desafiante mientras la tensión aumentaba dramáticamente, con Israel anunciando una nueva fase en el conflicto destinada a expulsar a Hezbollah de la frontera para permitir el regreso de miles de desplazados del norte de Israel.
Lanzó ataques que mataron a altos comandantes militares del grupo y se le atribuyó la explosión de miles de dispositivos de comunicaciones, utilizados principalmente por miembros de Hezbolá, que mataron a 37 personas e hirieron a miles.