Cuando Al Pacino contrajo COVID-19 hace cuatro años, estuvo a punto de encontrarse cara a cara con la muerte. Pero dice que “no vio la luz blanca ni nada”.
“Allí no hay nada”, recuerda la leyenda de la pantalla de 84 años, y añade: “[I]Ya no existía. Te has ido.”
El ganador del Oscar, al promocionar sus nuevas memorias, “Sonny Boy”, revisó su ataque de COVID-19 y le contó al New York Times cómo se desarrolló su experiencia cercana a la muerte. En medio del calor de la pandemia de 2020, la estrella de “Scarface” y “Godfather” no se sentía bien. Dijo que estaba deshidratado y que tenía fiebre. Después de contratar a una enfermera para que le ayudara a controlar su hidratación, Pacino dice: “Me había ido”.
Leer más: Al Pacino: La vida en imágenes
“Así. No tenía pulso”, dijo. “En cuestión de minutos estaban allí: la ambulancia delante de mi casa”.
El actor recordó el equipo médico que rápidamente se reunió en su casa, incluidos seis paramédicos y dos médicos que vestían equipos “que parecían venidos del espacio exterior o algo así”. Añadió que “fue impactante abrir los ojos y ver eso”.
El veterano actor calificó su encuentro con la muerte como “gachas extrañas” y explicó que le hizo cuestionar su propia existencia (“Estás aquí, no estás”) y sus recuerdos. Bromeó en otra parte de la entrevista: “Ya conocen a los actores: suena bien decir 'morí una vez'”.
Leer más: Al Pacino, de 83 años, y Noor Alfallah, de 29, esperan su primer hijo juntos
Pacino y su novia Noor Alfallah, de 29 años, dieron la bienvenida al bebé Roman el año pasado. A pesar de sentir que “no hay más” después de la muerte, Pacino dijo que siente que “tener hijos es un consuelo”. También dijo que Roman, uno de sus cuatro hijos, es una de las razones por las que quiso escribir “Sonny Boy”.
“Esa ha sido una campaña para que me quede más tiempo si es posible”, dijo el actor, que tiene varios proyectos cinematográficos en marcha.
“Sonny Boy” llegará a las tiendas el 15 de octubre.
Suscríbase a Indie Focus, un boletín semanal sobre películas y lo que sucede en el salvaje mundo del cine.
Esta historia apareció originalmente en Los Angeles Times.