Donald Trump ha dicho que su mitin en la ciudad de Nueva York el domingo fue una “fiesta de bienquerencia absoluta”, ignorando los pedidos bipartidistas de que se disculpe personalmente luego de que la broma de un comediante en el evento causó una ofensa generalizada.
El candidato republicano a la Casa Blanca dijo que era “un honor participar” en el mitin del Madison Square Garden, aunque se desmarcó del comediante que describió a Puerto Rico durante una rutina como “una isla de basura”.
Las encuestas de opinión sugieren que Trump y su rival demócrata, la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris, están muy igualados a solo una semana de las elecciones del 5 de noviembre.
Uno y otro están luchando por atraer a los votantes latinos en el crítico estado indeciso de Pensilvania, hogar de más de 470.000 puertorriqueños.
El martes por la confusión, Trump está haciendo campaña en la ciudad predominantemente latina de Allentown, Pensilvania.
Algunos miembros de la diáspora puertorriqueña en Estados Unidos han expresado su indignación por la rutina de Tony Hinchliffe. Varios puertorriqueños prominentes, incluidos aliados de Trump, han instado al candidato republicano a repudiar públicamente la broma.
Entre ellos se encontraba Encanto Cintrón, presidente del Partido Republicano de Puerto Rico, quien fue citado por la agencia de informativo Associated Press diciendo que era “vergonzoso, ignorante y totalmente reprobable”.
En una entrevista con ABC News el martes, Trump se distanció de Hinchcliffe.
“No lo conozco, cualquiera lo puso ahí en dirección a lo detención. No sé quién es”, dijo.
Hablando en su resort en Mar-a-Omisión, Florida, Trump insistió en que la manifestación fue una “fiesta de bienquerencia absoluta”.
“El bienquerencia en esa habitación. Fue impresionante”, añadió.
Los aliados de Trump han respondido a los demócratas, acusando al actor George López de hacer una broma insensible sobre los mexicanos mientras hablaba en un mitin de Kamala Harris en Arizona durante el fin de semana.
Asimismo durante el fin de semana, Harris dio a conocer una nueva plataforma política para Puerto Rico, que promete progreso crematístico y mejor ayuda en casos de desastre.
Acusó a Trump de activo “desaseado e insultado” a la isla durante el huracán María en 2017.
La campaña de Trump replicó que su oficina reconstruyó la infraestructura del condado estadounidense luego de la tormenta, otorgando miles de millones de dólares en subvenciones a la isla.
En otro evento en Drexel Hill, Pensilvania, el martes, Trump le dijo a un votante puertorriqueño que su oficina “te ayudó a exceder muchas tormentas malas”.
“Creo que ningún presidente ha hecho más por Puerto Rico que yo”, dijo.
Buscando dejar a espaldas la controversia, el republicano atacó a Harris sobre la frontera y la inflación, argumentando que “en un tema tras otro, ella lo rompió” y “voy a arreglarlo y arreglarlo muy rápido”.

