Los jueces de la Corte Suprema Clarence Thomas, Samuel Alito y Neil Gorsuch objetaron el martes la decisión de sus colegas de ponerse del lado de la administración Biden en una apelación relacionada con el aborto. La mayoría de la Corte Suprema permitió que el gobierno retuviera fondos federales de planificación familiar para Oklahoma porque el estado se niega a derivar a las pacientes embarazadas a una línea directa nacional que brinda información sobre el aborto.
La orden que rechaza la solicitud de emergencia de Oklahoma no proporciona una explicación; simplemente señala que la solicitud fue denegada y que Thomas, Alito y Gorsuch la habrían concedido si hubieran podido.
Esa falta de explicación no es inusual en el llamado expediente paralelo de la corte, donde las cuestiones se deciden en un cronograma acelerado sin información completa ni audiencias. Tampoco es sorprendente que esos tres jueces se separaran de sus colegas en la última acción relacionada con el aborto, luego de que la corte revocara Roe v. Wade en 2022. Si bien Thomas, Alito y Gorsuch fueron solo tres de los cinco jueces de la mayoría de Dobbs que votaron para desechar Roe (los otros dos fueron los jueces Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett), podrían ser los votos más confiables para los litigantes antiabortistas.
Vimos eso durante el último período, por ejemplo, cuando el tribunal permitió que los abortos de emergencia en Idaho siguieran adelante por el momento, a pesar del disenso de esos mismos tres jueces.
En otra orden reciente del verano sobre un tema distinto, esos tres jueces señalaron en una apelación sobre el derecho al voto en Arizona que se habrían puesto totalmente del lado de los republicanos en ese caso, Comité Nacional Republicano contra Mi Familia Vota. Ese fue el indicador más reciente de que el derecho al voto es un factor impredecible de cara a las elecciones de noviembre, y esos tres jueces podrían estar dispuestos a llegar tan lejos como quieran los republicanos, mientras que los otros designados por los republicanos podrían decidir hasta dónde llegará la corte en su conjunto.
El próximo período de la Corte Suprema comienza en octubre, y la orden del martes sugiere que esa dinámica también está en juego en asuntos relacionados con el aborto.
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Este artículo fue publicado originalmente en MSNBC.com