Brian McShea planeó una propuesta de ensueño en la playa, pero posteriormente del devastador y alimentado por el fuego de Eaton redujo su vecindario de California a las cenizas, se encontró en una rodilla en los escombros de su casa que una vez fue tomada. Con calles destruidas, cafeterías familiares cerradas, y su pequeño bungalow celeste perdido, Brian y su prometida, Stephanie Raynor, eligieron confrontar su futuro incierto con esperanza y aprecio.