HISTORIA: OpenAI ha cerrado su última ronda de recaudación de fondos, recaudando 6.600 millones de dólares de los inversores.
Eso valora al fabricante de ChatGPT en alrededor de 157 mil millones de dólares, consolidando su estatus como una de las empresas privadas más valiosas del mundo.
El principal patrocinador corporativo, Microsoft, estuvo entre los que invirtieron dinero.
La campeona de chips de IA, Nvidia, también contribuyó.
Al igual que el gigante inversor japonés SoftBank.
Pero Apple no lo hizo, a pesar de informes recientes de que sí lo haría.
Todo llega en medio de esfuerzos de reestructuración y una serie de salidas de ejecutivos.
Eso incluye la salida la semana pasada de la directora de tecnología Mira Murati, durante mucho tiempo una de las caras más destacadas de la empresa.
Nada de eso parece haber preocupado a los inversores, que están entusiasmados con las proyecciones de crecimiento de OpenAI.
Fuentes de Reuters dicen que el jefe Sam Altman proyecta ingresos de 3.600 millones de dólares este año, y aproximadamente tres veces esa cantidad el próximo año.
Se espera que obtenga una gran porción del capital de la startup como parte de la reestructuración.
Es posible que la ronda de recaudación de fondos también haya incluido medidas para proteger la ventaja de OpenAI sobre sus competidores.
Las fuentes dicen que se pidió a los inversores que no invirtieran dinero en cinco empresas rivales.
Entre los que estaban en la lista de prohibidos se encontraba Anthropic, respaldado por Amazon.
Y xAI, fundada por el multimillonario de Tesla, Elon Musk.
Ninguna de las empresas implicadas hizo comentarios sobre ese informe.