Las autopsias iniciales de cuatro de las siete víctimas que murieron cuando un superyate se hundió en una tormenta en Italia el mes pasado muestran que murieron por “ahogamiento seco”, según las autoridades.
El fenómeno, también conocido como “ahogamiento atípico”, significa que no tenían agua en los pulmones, la tráquea o el estómago, dijo un portavoz del abogado del capitán del Bayesian, que se hundió frente a las costas del puerto siciliano de Porticello el 19 de agosto.
La causa de la muerte de las primeras cuatro víctimas sugiere que habían encontrado una burbuja de aire en la cabina en la que fueron descubiertos los cuerpos de cinco de las víctimas, y habían consumido todo el oxígeno antes de que la bolsa de aire se volviera tóxica debido al dióxido de carbono, según informes de medios locales.
Las autopsias del abogado estadounidense Chris Morvillo, de su esposa Neda Morvillo, del banquero de Morgan Stanley Jonathan Bloomer y de su esposa Anne Elizabeth Judith Bloomer se realizaron este miércoles en el Instituto de Medicina Legal del Policlínico de Palermo, informaron las autoridades.
Se espera que el viernes se realicen las autopsias del gigante tecnológico británico Mike Lynch y su hija de 18 años.
Aún no se ha fijado una fecha para la autopsia de Recaldo Thomas, el chef a bordo del barco, debido a la dificultad para llegar hasta su familia en Antigua.
Las siete víctimas fueron examinadas el sábado pasado para detectar lesiones y no se encontró que ninguna hubiera sufrido fracturas de huesos ni otras lesiones físicas que pudieran haber contribuido a sus muertes.
El fiscal que investiga el caso sugirió por primera vez a principios de agosto la idea de que las víctimas habían estado buscando una bolsa de aire.
Las autopsias forman parte de la investigación criminal sobre el capitán del barco, James Cutfield, el ingeniero de máquinas del barco, Tim Parker Eaton, y el marinero Matthew Griffith, que estaba de guardia la noche del accidente. Ninguno de los hombres se encuentra en Italia.
Los investigan por “homicidio múltiple” y por provocar un naufragio, pero las autoridades afirman que esto no significa que se les imputará ningún delito. El fiscal a cargo de la investigación les permitió salir del país.
El yate de 56 metros se hundió a los 16 minutos de ser golpeado por un tornado en la madrugada del 19 de agosto. El barco tendrá que ser sacado a flote para realizar las investigaciones y para asegurar que los 18.000 litros de combustible a bordo no se filtren al mar en las cercanías del puerto de Porticello, cerca de Palermo.
Se han enviado ofertas para el rescate, que será pagado por la compañía de la esposa de Lynch, Angela Bacares, propietaria del yate.
Los resultados toxicológicos de las siete víctimas se esperan en los próximos días. No se realizaron pruebas de alcoholemia ni de drogas a ninguno de los tripulantes, indicó el fiscal en una conferencia de prensa después de que se recuperaron todos los cuerpos de las víctimas.
Lynch y su socio comercial Stephen Chamberlain, que murió tras ser atropellado por un coche en Londres el día en que se hundió el Bayesian, habían sido absueltos de los cargos de fraude en un tribunal estadounidense en junio de 2024. Los cargos estaban relacionados con la venta de su empresa Autonomy a Hewlett Packard, que ha dicho que no retirará su demanda civil por 4.000 millones de dólares en daños y perjuicios que ahora se está tramitando en un tribunal del Reino Unido.
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