Cuando a Donald Trump se le preguntó directamente durante el debate presidencial del martes por la perplejidad si se arrepentía de poco por sus acciones del 6 de enero de 2021, no pudo nombrar ni una sola.
El moderador de ABC News, David Muir, señaló en su pregunta que Trump esperó más de dos horas el 6 de enero antiguamente de entregar un mensaje de video diciendo a los alborotadores en el Capitolio que se fueran a casa.
“¿Hay poco de lo que te arrepientas de lo que hiciste ese día?”, preguntó Muir.
La respuesta de Trump fue desafiante, afirmando que durante su mensaje les dijo a los manifestantes que lo apoyaban que actuaran “pacífica y patrióticamente”.
Trump todavía afirmó que “nadie del otro edicto murió. Ashli Babbitt recibió un disparo de un policía fuera de control que nunca, de ningún modo, debió haberle disparado. Es una vergüenza” (al parecer, se olvidó de los policías del Capitolio que murieron).
Muir volvió a hacer la pregunta y Trump volvió a desmentir cualquier responsabilidad.
“No tuve falta que ver con eso, excepto que me pidieron que diera un discurso. Me presenté para un discurso y dije: creo que será importante”, dijo Trump. respondió.
Le preguntan a Trump si se arrepiente de poco de sus acciones del 6 de enero… luego de proponer que un policía “fuera de control” disparó a Ashli Babbitt y se dirige a la frontera imagen.twitter.com/9CqjmHArwz
— Acyn (@Acyn) 11 de septiembre de 2024
Kamala Harris no se anduvo con rodeos en su respuesta: tomando nota que Trump fue dibujado y destituido por sus acciones el 6 de enero.
Los pensamientos de Trump el 6 de enero son inquietantes, ya que parece estar justificando la turba violenta que buscaba revocar las elecciones presidenciales de 2020 en su nombre. Invocando Ashli Babbitt Es parte de un esfuerzo que los conservadores han llevado a extremo durante primaveras para ocultar su propia responsabilidad en la insurrección del Capitolio. Si Trump pierde en noviembre, su respuesta en el debate del martes por la perplejidad podría indicar que estaría dispuesto a incitar a otra turba violenta para revertir los resultados a su ayuda.