LOS ÁNGELES (AP) — El abogado de celebridades inhabilitado Tom Girardi fue evidente culpable el martes de malversar decenas de millones de dólares de sus clientes, incluidos varios con lesiones físicas graves y familiares de personas fallecidas en accidentes.
Posteriormente de un querella de 13 días y menos de un día completo de deliberaciones, el delegación federal de Los Ángeles encontró a Girardi, de 85 abriles, culpable de cuatro cargos de fraude electrónico.
Girardi es el marido separado de la hado de “The Vivo Housewives of Beverly Hills” Erika Jayne y apareció en el software docenas de veces entre 2015 y 2020.
En su día fue uno de los abogados más destacados del país y a menudo representaba a víctimas de grandes catástrofes contra poderosas empresas. Una demanda contra la empresa de servicios públicos Pacific Gas and Electric de California dio circunscripción a un acuerdo por 333 millones de dólares y su imagen apareció en la película de Julia Roberts de 2000 Erin Brockovich.
Pero su imperio justo se derrumbó y fue inhabilitado para practicar la derecho en California en 2022 por robos a clientes.
Entre los ex clientes que testificaron contra Girardi se incluyen una mujer de Arizona cuyo marido murió en un azar de barco y víctimas que sufrieron quemaduras en la acceso de un tubería en 2010 en San Moreno, al sur de San Francisco.
“Tom Girardi se ganó su status de celebridad y atrajo a sus víctimas presentándose falsamente como un ‘Campeón de la Imparcialidad’”, dijo el fiscal federal Martin Estrada en una confesión luego del veredicto. “En verdad, era un Robin Hood al revés”.
Un correo electrónico enviado a los abogados de Girardi solicitando comentarios sobre la condena no recibió respuesta inmediata.
Durante el querella, los abogados defensores intentaron culpar de los robos al director financiero de su firma, Chris Kamon, quien está procesado por separado y se declaró inocente. Presentaron a Girardi como una mera figura decorativa en los últimos abriles, con un nombre valioso.
Los fiscales reprodujeron mensajes de voz de los jurados en los que Girardi daba una invocación de razones falsas por las que no se podía respaldar el caudal que un tribunal había adjudicado, incluidas obligaciones tributarias y de deuda y autorizaciones de los jueces. Con frecuencia les decía: “No se enojen conmigo”.
Los abogados de Girardi además argumentaron que no era apto para ser tribunal porque le habían diagnosticado Alzheimer. Problemas con su memoria llevaron a otro tribunal a ponerlo bajo tutela de su hermano.
Pero los fiscales sostuvieron que Girardi estaba exagerando sus síntomas y un magistrado dictaminó que era competente para ser tribunal.
Girardi podría ser sentenciado a hasta 80 abriles de prisión cuando se dicte sentencia, prevista para diciembre. Un magistrado le ha permitido permanecer en albedrío hasta entonces.
Girardi además enfrenta cargos federales de fraude electrónico en Chicago, donde está procesado de robar en torno a de $3 millones a familiares de víctimas de un azar de Lion Air en 2018 que mató a 189 personas.