El rey maorí de Nueva Zelanda, Tuheitia Pootatau Te Wherowhero VII, murió el viernes por la mañana rodeado de su esposa y sus tres hijos. Tenía 69 años.
El monarca fue ingresado en un hospital, donde fue sometido a una cirugía cardíaca pocos días después del 18º aniversario de su coronación.
“La muerte de Kiingi Tuheitia es un momento de gran tristeza para los seguidores de Te Kiingitanga, el maorí y toda la nación”, dijo el portavoz Rahui Papa en un comunicado.
El rey Carlos III dijo que estaba “profundamente entristecido” por la muerte del amigo de décadas de la familia real británica. Carlos dijo que la noticia de la muerte del rey Tuheitia “es un shock particular”, ya que ambos compartían una larga amistad.
El rey nació con el nombre de Tuheitia Paki en 1955 y sucedió a su madre, la reina Dame Te Atairangikaahu, en 2006. “Creo que el futuro es un nuevo horizonte donde los maoríes toman el liderazgo”, dijo en la celebración del aniversario de su coronación a principios de este mes.
“Sigamos adelante mientras enfrentamos una tormenta, no hay necesidad de preocuparse. En esta tormenta somos fuertes. Juntos. El viento en nuestras velas es la unidad, y con eso alcanzaremos nuestro destino”, agregó.
El rey maorí es considerado el jefe supremo de varias tribus o iwi, pero no está afiliado a todas ellas. El papel del monarca no tiene autoridad judicial ni legal en Nueva Zelanda y es principalmente ceremonial.
El Movimiento King, o Kiingitanga, se originó en 1858 en un intento de unir a las tribus indígenas de Nueva Zelanda bajo un solo líder para fortalecer su resistencia al colonialismo.
El papel del monarca no es necesariamente hereditario y el nuevo líder será designado por los jefes de las tribus asociadas al Movimiento del Rey el día del funeral del Rey Tuheitia pero antes de su entierro, según Radio Nueva Zelanda.
Christopher Luxon, el primer ministro de Nueva Zelanda, en una publicación en X dijo: “Hoy lamentamos la pérdida de Kiingi Tuheitia.
“Su compromiso inquebrantable con su pueblo y sus incansables esfuerzos por defender los valores y las tradiciones del Kiingitanga han dejado una huella indeleble en nuestra nación.
“Recordaré su dedicación a Aotearoa Nueva Zelanda, su compromiso con mocopuana (Nieto en maorí), su pasión por Te amo maorí (el idioma maorí) y su visión de un futuro donde todas las personas sean tratadas con dignidad y respeto”.
El rey Carlos dijo que recordaría su amistad con Tuheitia con “inmenso cariño”, después de haber visitado Nueva Zelanda en 2015, donde él y la reina Camilla visitaron la ciudad de Ngaruawahia con el rey y su esposa, Makau Ariki.
“Estaba profundamente comprometido con la creación de un futuro sólido para los maoríes y Aotearoa Nueva Zelanda basado en la cultura, las tradiciones y la curación, algo que llevó a cabo con sabiduría y compasión”, afirmó Charles.
“Su muerte supone un shock especial porque había hablado con Kiingi por teléfono muy recientemente, a principios de agosto”.
La ex primera ministra de Nueva Zelanda, Dame Jacinda Ardern, lo describió como “un defensor de los maoríes, de la equidad, la justicia y la prosperidad”.
Ella le dijo a ABC que el Rey Tuheitia “trabajó incansablemente para construir la comprensión y el conocimiento de nuestra historia compartida y, al hacerlo, fortaleció Aotearoa”.