Rickey Henderson: Los jugadores de Grandes Ligas lamentan la homicidio del líder en robos de todos los tiempos de la MLB

OAKLAND, CA - 5 DE SEPTIEMBRE: Rickey Henderson se dirige a la multitud durante una ceremonia previa al juego para presentar a los primeros miembros del Salón de la Fama de los Atléticos de Oakland antes del juego entre los Atléticos y los Yankees de Nueva York el 5 de septiembre de 2018 en Oakland, California. Los Atléticos derrotaron a los Yankees 8-2. (Foto de Michael Zagaris/Oakland Athletics/Getty Images)OAKLAND, CA - 5 DE SEPTIEMBRE: Rickey Henderson se dirige a la multitud durante una ceremonia previa al juego para presentar a los primeros miembros del Salón de la Fama de los Atléticos de Oakland antes del juego entre los Atléticos y los Yankees de Nueva York el 5 de septiembre de 2018 en Oakland, California. Los Atléticos derrotaron a los Yankees 8-2. (Foto de Michael Zagaris/Oakland Athletics/Getty Images)

Rickey Henderson era el ideal platónico de un primer bate, sin mencionar que era amado como persona. (Foto de Michael Zagaris/Oakland Athletics/Getty Images)

El mundo de la MLB perdió el sábado a su líder de todos los tiempos en bases robadas con la crimen de Rickey Henderson, quien estuvo entre las estrellas más brillantes del béisbol de las décadas de 1980 y 1990.

Henderson siempre será recordado como el hombre que se robó 1,406 bases, una marca que podría ser uno de los verdaderos récords inquebrantables de la MLB. El deportista activo con esa marca es Starling Marte con 354, aproximadamente una cuarta parte del total de Henderson.

Sin secuestro, Henderson era mucho más que un demonio en las bases. Tenía poder, con 297 jonrones en su carrera. Tuvo disciplina en el plato, retirándose como el líder de todos los tiempos de la MLB en bases por bolas con 2,190 (sólo Barry Bonds ha superado esa marca). Tenía defensa del Mitón de Oro y dos anillos de Serie Mundial. Y tenía una personalidad descomunal, sin dejar de ser tan productivo como cualquier hado:

Cuando una aleación pierde a un deportista así, sus compañeros lo sienten. Incluso ayer de la nueva de la crimen de Henderson, llegaron homenajes de los antiguos compañeros de equipo, oponentes y entrenadores de Henderson en las grandes ligas, sin mencionar a todos los jugadores que surgieron idolatrándolo.

Dave Winfield, compañero de equipo del Salón de la Éxito de Henderson en los Yankees de Nueva York, fue el primero en hacerlo: