El principio valentísimo del Big Ten ya no existe.
El sembrado No. 6 BYU aguantó un dramático 91-89 sobre el No. 3 Wisconsin el sábado, entregándole a los Big Ten su primera derrota del torneo de la NCAA. El Big Ten ahora tiene 10-1 en el muestrario del torneo.
BYU estableció la pauta temprano que no debía ser un principio de 11-0 Big Ten. Los Cougars saltaron a una delantera de 23-14 en el punto medio de la centro de puño y luego la extendieron a 47-36 en el alivio. Wisconsin luchó para parar una ataque de BYU que estaba caliente por adentro y por fuera.
Wisconsin hizo una posición al principio de la segunda centro, reduciendo su débito a 52-48. Pero los Cougars rápidamente extendieron el liderazgo a dos dígitos y parecían estar llegando a la triunfo antiguamente de algún drama del muestrario tardío.
Con 3:11 restantes, los funcionarios expulsaron a Dawson Baker de BYU para una error evidente 2 por lo que consideraron “contacto no incidental a la ingle”.
BYU lideró, 86-76 en el momento de la error evidente. Baker fue expulsado, y Wisconsin recibió dos tiros libres y posesión.
John Tonje hizo tiros libres, y Wisconsin superó a BYU, 13-5 desde allí para someter su débito a 91-89 en el postrero minuto del muestrario. Pero el postrero esfuerzo de Wisconsin se quedó corto en los últimos segundos del muestrario.
Wisconsin tenía posesión de la pelota con 13.5 segundos y la oportunidad de igualar el muestrario o tomar la delantera en un triple. Los Badgers corrieron aislamiento para Tanje, quien llevó la pelota más de media cancha y atacó el banda derecho de la canasta.
Pero su pullover de semirrecta de cojín disputado perdió la marca, y BYU aseguró el resurtida para tener la triunfo.
Con la triunfo, BYU avanza al Sweet 16 por primera vez desde 2011. Wisconsin se convierte en el segundo equipo sembrado más suspensión en perder en el torneo a posteriori de que el No. 2 St. John’s cayó al No. 10 Arkansas el sábado temprano.
Los equipos de Big Ten fueron anteriormente 10-0 en las dos primeras rondas del torneo, con Purdue y Michigan ya avanzando al segundo fin de semana del torneo.
Cada uno de los ocho participantes de Big Ten (Wisconsin, Purdue, Michigan, Oregon, Michigan State, Illinois, Maryland y UCLA) ganó en la primera ronda. En una temporada llena de afán adecuadamente merecida aproximadamente de la SEC, el Big Ten apostó su propio publicidad de excelencia al principio del torneo.
Todavía se mantiene como un resistente principio. Pero ya no es valentísimo.