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Los New York Jets hicieron algunos cambios importantes para tratar de impulsar una temporada que alguna vez fue prometedora y que iba cuesta abajo.
Robert Saleh fue despedido como entrenador después de un inicio de 2-3, el entrenador interino Jeff Ulbrich cambió a los encargados de las jugadas ofensivas y los Jets adquirieron a Davante Adams para reunirlo con Aaron Rodgers.
De alguna manera, Nueva York está ahora en peores condiciones.
Los Jets perdieron 25-22 el domingo ante un equipo de Nueva Inglaterra que había perdido seis partidos seguidos y se vio obligado a incorporar a Jacoby Brissett, el mariscal de campo durante el inicio de 1-4 de los Patriots. Brissett, que jugó después de que el novato Drake Maye fuera marginado por una conmoción cerebral, llevó a Nueva Inglaterra a su primera victoria en casa en más de un año.
Y ayudó a que Nueva York sufriera su quinta derrota consecutiva, y la tercera consecutiva bajo la dirección de Ulbrich. Los Jets ahora están empatados con los Patriots en el último lugar de la AFC Este.
“Este es un momento de oscuridad y entendemos que el mundo exterior va a ser muy ruidoso en este momento”, dijo Ulbrich.
Rodgers agregó: “Sí, he estado en la oscuridad. Tienes que entrar allí y hacer las paces con eso”.
Greg Zuerlein falló dos tiros (un gol de campo y un punto extra) y los Jets consumieron los tres tiempos muertos de la primera mitad del primer cuarto, dos de ellos con 44 segundos de diferencia en la misma serie.
“En uno de ellos, estábamos rezagados en la reunión, en otro estaba tratando de conseguir la protección correcta”, dijo Rodgers, quien lanzó para 233 yardas y dos touchdowns. “En uno sentí que podríamos haber salido, pero estuvo bien llevarlo allí. Nuestra operación fue un poco lenta a veces”.
Nueva York aprovechó un tiempo muerto tras un pase incompleto donde Rodgers buscó a Garrett Wilson. Ese tiempo muerto habría sido útil durante la última serie de los Jets que comenzó desde su propia yarda 30 con 22 segundos restantes.
Otro percance del reloj ocurrió cuando Nueva York sufrió un retraso en el juego mientras se alineaba para una conversión de 2 puntos después de que Braelon Allen corriera para un touchdown de 2 yardas con 2:57 restantes. Desde el 7, Rodgers completó un pase al 5 y el intento falló.
“Tenemos que ser mejores desde el punto de vista de las operaciones, simplemente en general, y eso es cada jugador, cada entrenador. Ese es Aaron. Esos somos todos nosotros”, dijo Ulbrich.
Zuerlein falló un intento de punto extra en el primer cuarto, luego se fue por la izquierda en su intento de gol de campo de 44 yardas que habría permitido a los Jets aumentar su ventaja de 16-14 en el último cuarto. El veterano ha fallado seis tiros de campo esta temporada.
Ulbrich insistió en que no se arrepiente de seguir con Zuerlein a pesar de sus recientes fracasos.
“Tenemos que analizar detenidamente todo lo que hacemos, todo”, dijo Ulbrich. “No depende sólo de Greg, depende de todos nosotros. Lo haremos esta semana”.
El debut de Haason Reddick después de una larga resistencia no proporcionó un impulso inmediato a la defensa de Nueva York.
Los Jets permitieron que una ofensiva de los Patriots que tuvo grandes problemas durante la racha de cinco juegos de Brissett como mariscal de campo titular llegara a la zona de anotación dos veces durante la segunda mitad. En la serie ganadora, los Jets permitieron a los Patriots convertir una tercera y 10 mientras el esquinero Sauce Gardner defendía en la jugada de pase de 34 yardas que movió el balón a la yarda 9 de los Jets.
“La NFL es difícil. Es difícil ganar. Más difícil cuando te lo pones difícil a ti mismo”, dijo Rodgers.
Información de The Associated Press.
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