Para la mayoría de las figuras de los medios nacionales que cubren la NFL, los Gigantes de Nueva York no pueden hacer mínimo correctamente en estos días.
El bajo rendimiento de Big Blue en la última período ha dejado a muchos expertos reclantes de si verdaderamente están en camino de regreso del sótano de la NFL.
En el ranking de ESPN Nation de los 32 equipos de la NFL posteriormente de la agencia huido, los Gigantes clasificaron, lo adivinaron, 32º.
Citaron el mejor movimiento de los Gigantes en esta temporada desprecio como el fichaje del ex ala defensiva de los Dallas Cowboys Chauncey Golston.
Los Gigantes necesitaban mucho para amplificar profundidad de la raya defensiva. Golston es uno de varios defensores nuevos. Tenía una sólida tasa de victorias de pase del 9.3% como tackle defensivo con los Cowboys la temporada pasada, que habría ocupado el puesto 21 en la NFL si hubiera jugado suficientes instantáneas allí para adscribir. Parece ser un ajuste ideal unido a Dexter Lawrence II en situaciones de pases con Nueva York.
Fue una buena apéndice que tiene dos propósitos. Primero, reemplazar al apoyador forastero Azeez Ojulari (quien firmó con Filadelfia la semana pasada) y segundo, para rellenar posiblemente rellenar la ex selección de la primera ronda Kayvon Thibodeaux, a quien los Gigantes aún no han cometido un botellín año.
Pero el ranking muerto está siendo yeguada debidamente por el directivo militar Joe Schoen, quien, en su cuarta temporada desprecio, aún no tiene una opción competitiva en el quarterback.
Para que los Gigantes cambien la opinión negativa de ellos mismos, primero deben cambiar la novelística. Eso solo puede tener lugar por ingresar, poco de lo que no han hecho mucho desde su trofeo en el Super Bowl XLVI en febrero de 2012.